Lo que Siembras hoy como Padre es lo que ellos recogen mañana como Hijos
La Crianza es como una Siembra
La Crianza, así como la Siembra, requiere de un proceso, un paso a paso, un dar todos los días de forma constante para lograr al final que prospere la semilla de lo que has proyectado.
No importa lo que quieres sembrar, pues esto lo definen ustedes como sembradores; pero todos los días debes dar un poco de todo para que prospere esta semilla: Amor como agua. Vínculo como aire. Hábitos y Rutinas como estructura o tierra. Valores como nutrientes.
Antes de empezar a sembrar debes preparar la tierra, debes generar un ambiente propicio para que la semilla prospere. Es igual como en la siembra, en el Hogar debemos generar un ambiente propicio para la germinación: ambientes de organización, de respeto y amor, de vínculo, de comunicación.
Ambientes de organización
Organización en la rutina de la tarde. Es decir, una rutina clara y organizada, en la que debes enseñar a tu niño a priorizar. “La responsabilidad va primero, después va el descanso”. Y en donde es tan importante estudiar como descansar, siempre luego de estudiar se debe descansar. “Termina lo que inicias”, donde le debes enseñar que siempre la actividad debe ser culminada para iniciar una nueva. “Después de hacer la tarea recoge los útiles y guardarlos en su lugar, limpia tu puesto de trabajo, arregla la silla y deja todo como estaba al inicio”. Si es una actividad de juego, “recoge y guarda los juguetes”. Si es de comida “levantemos los platos y los vasos, lavemos y limpiemos la mesa después de recoger los individuales”.
Organización en el Tiempo y en el Espacio: “Un tiempo y un lugar para cada cosa”. Es decir, “se come en la mesa del comedor, no encima de la cama”, “Se ve televisión en el estar de tele y sentados en el sofá, no vemos televisión en el cuarto mientras dormimos”. “Dormimos en la cama, no en el sofá”. “Es momento de jugar, no de estudiar”. “Es momento de comer no de chatear”.
La organización la define el espacio, “Un lugar para cada cosa”, pero también el tiempo “Un tiempo para cada actividad”.
Cuando como padre habitúas a los hijos a la Organización en la tarde o Rutina: Todos ganan!: “El se vuelve autónomo y tu dejas de pelear con él”.
Ambientes que fomenten la Organización y la Autonomía
La ubicación y la organización de las cosas en el espacio deben estar pensadas para el niño, no pensadas para la comodidad del adulto. Es decir, si queremos que el niño organice su maleta todos los días después de llegar del colegio, debemos pensar en un lugar a su alcance y que no dependa del adulto para subir la maleta o colgarla. Si queremos que el niño se aprenda a lavar los dientes con autonomía, debemos ubicar el cepillo de dientes y crema en un lugar a donde el niño logre llegar, y sacarlos y usarlos sin requerir a un adulto apoyándolo. Por otro lado, las cosas deben tener su lugar, y no cualquier lugar. De esta manera el niño sabrá que es ahí donde lo debe encontrar y no dependerá del adulto para su ubicación.
Habituar en Responsabilidad
Desde pequeño puedes empezar a dar a tu hijo pequeñas responsabilidades, responsabilidades son tareas que se deben hacer todos los días, no porque nadie se lo pida, no como castigo. Poner su ropa sucia en la lavadora. Poner la mesa del desayuno. Dar el agua a la mascota. Arreglar las medias en el cajón. Quitar el polvo de las mesas. Barrer el cuarto… Tender la cama. Lavar la ropa… Si hace estas tareas o responsabilidades todos los días se vuelven un hábito. Para cada edad unas responsabilidades diferentes. Estas responsabilidades además de fomentar la Autonomía y Autoeficacia, fomentan el sentido Social de solidaridad, de respeto hacia el otro, de trabajo en equipo, de equidad. Habitúas en Responsabilidad.
Comunicación y Vínculo: antes que Corrección y Disciplina primero la Conexión
Para que puedas educar a tu hijo en Organización, en Disciplina, en manejo del Tiempo y en Conciencia de Responsabilidad debes primero y luego en paralelo, Fortalecer el Vínculo. Conectarte con el, no a través del castigo y el regaño, esto no es posible, conectarte a través de juego, a través de actividades recreativas. Del diálogo, de la escucha, del abrazo. Conectarte con él a través del Amor. En la crianza, así como en la siembra se requiere un equilibrio entre todo. El equilibrio entre: educar en Disciplina y Organización teniendo un Vínculo fuerte y estrecho con tu Hijo de Conexión, de Empatía, de Comunicación. Recuerda, Primero conexión, luego Corrección
Si quieres una orientación en estos temas te recomiendo el Programa Afectivo-Emocional y Motivacional de Ludikcenter
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